Vivir en el Eixample es sinónimo de estilo y cultura, y este piso reformado refleja perfectamente esa esencia. Situado en una finca regia con ascensor, combina elementos originales como suelos hidráulicos, techos con bóveda catalana y ladrillo visto con un diseño moderno y funcional. Con 131 m² interiores y una terraza de 6 m², ofrece tres habitaciones (dos dobles y una individual), dos baños (uno en suite) y una cocina equipada con electrodomésticos Bosch. Dispone de aire acondicionado por conductos, iluminación LED y acabados de alta calidad. Ubicado en una zona privilegiada con excelentes conexiones y servicios, es una joya que une tradición y modernidad.